Soy Marta, una madrileña de nacimiento y corazón que actualmente vive en Alicante.
Desde muy pequeña conocí el dolor emocional y también tenía claro qué quería ser de mayor
En el cuarto año de carrera lo vi con más luz, cuando una persona muy especial para mí fue diagnosticada de leucemia y 7 meses más tarde fallecía. Pero mi vocación se hizo más consciente cuando unos meses después, quien enfermó de cáncer fue mi madre
Desde entonces, me he dedicado a la psicología clínica pero sobretodo a la psicooncología en cuerpo y alma. Mi trabajo es mi vocación. Disfruto y aprendo acompañando en el proceso de cambio y aprendizaje a todas y cada una de las personas que cuentan conmigo para ello
He trabajado en cuidados paliativos y fue una de las mejores épocas que recuerdo. También tengo experiencia en cáncer familiar y tratamientos experimentales, gracias a mi trabajo en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid. El duelo también es otra de mis pasiones. Así que combino esto con mi trabajo como psicóloga sanitaria, donde realizo tratamiento psicológico a adultos, niños y adolescentes
Desde 2013 ejerzo la psicología desde el punto de vista clínico y fue en este año cuando comenzó mi relación con el campo de la oncología. Desde entonces, he estado apoyando a familias y pacientes con todo tipo de cáncer y en cualquier momento de la enfermedad. También he trabajado en la Unidad de Cáncer Familiar, algo todavía muy desconocido para algunos. Los cuidados paliativos han sido mi gran descubrimiento y experiencia, trabajando el apoyo en el final de la vida, las despedidas, la espiritualidad o interviniendo en situaciones de crisis, por ejemplo
Estuve como voluntaria en una unidad de apoyo en duelo por fallecimientos traumáticos. En esta etapa pude trabajar desde una perspectiva más humanista y de acompañamiento a padres que habían perdido a sus hijos, a hijos que habían perdido a sus padres, a hermanos o a personas con quien tenían un vínculo muy especial
También me dedico a la psicología general. Trabajo con niños con dificultades emocionales y de aprendizaje o adolescentes con problemas de autoestima o insatisfacción con su imagen corporal, por ejemplo. Por otro lado, acompaño a adultos en momentos vulnerables o difíciles desde el punto de vista individual o como pareja.
He sido coterapeuta en grupos de habilidades sociales, inteligencia emocional y comunicación en pareja. También he impartido charlas para padres y talleres de formación.
Y por último, he emprendido una nueva aventura llamada “Charlas con Queso”, un espacio de salud y bienestar de psiconutrición oncológica junto a Victoria Góngora.
Mi gran objetivo es dar apoyo psicológico a personas que sufren, independientemente de su estado de salud. Mi especialidad es la enfermedad oncológica, los cuidados paliativos y el duelo pero con el mismo mimo y la misma pasión trabajo la psicología clínica. Mi intención es que la persona que sufre, cambie su forma de interpretar la realidad para aliviar el dolor emocional y poder manejarlo con más facilidad.